Vía telefónica, los presidentes López Obrador y Joe Biden acordaron un nuevo diálogo para tratar el tema de la migración hacia Estados Unidos a través de México. Washington enviará a una comitiva especial que se reunirá con el mandatario mexicano y su equipo.
22/12/2023 (Ciudad de México). Mediante llamada telefónica atendida directamente por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador y su homólogo estadounidense, Joe Biden, acordaron ampliar el diálogo “en relación con los esfuerzos para gestionar la migración en el hemisferio occidental”, informó el mandatario norteamericano vía sus redes sociales.
Más tarde, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kirby, agregó que para este diálogo se creará una comitiva compuesta por Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional; Liz Sherwood Randall, asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca; y Antony Blinken, secretario de Estado, quienes se presentarán ante López Obrador y su equipo el próximmo 27 de diciembre. El encuentro se realizará en medio de un panorama político agitado en Estados Unidos y un aumento significativo en los cruces fronterizos.
Republicanos y demócrata hacen uso de la migración con fines electorales
Con el proceso electoral en puerta para renovar la presidencia de Estados Unidos, el tema de la migración hacia este país es nuevamente abordado por la clase política.
Recientemente, el presidente Joe Biden solicitó al senado recursos adicionales para financiar la guerra en Ucrania y la ofensiva bélica israelí, así como para su seguridad fronteriza, sin embargo, esta fue congelada por los republicanos quienes le exigen al mandatario endurecer las medidas antiinmigrantes en su frontera sur a cambio de la aprobación presupuestaria.
El republicano Mike Johnson, presidente de la Cámara de Representantes, pide a su ejecutivo federal limitar las acciones de la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras, la cual deja en libertad a inmigrantes sin cita judicial, entre otras acciones que incluyen deportaciones y acuerdos con terceros países que acojan a los solicitantes de asilo en Estados Unidos.
Mientras tanto, este mismo cuerpo legislativo decidió posponer la discusión de una reforma a las leyes migratorias estadounidenses para el próximo año, mientras la crisis en la frontera continúa presente.
Bajo esta misma línea, las acciones de presión por parte de los republicanos continúan desde otros flancos, como es el caso de las emprendidas por el gobernador de Texas. Greg Abbott, quien además de haber instalado una cerca de boyas con púas en el río Bravo y extralimitar las funciones de las autoridades locales en temas de migración, también ha transportado, en autobuses y aviones, desde Texas a cientos de migrantes a ciudades gobernadas por demócratas. Entre estas ciudades la más relevante es Chicago, donde el próximo año se realizará la Convención Nacional Demócrata.
A esto también se suma la retórica utilizada por el ex presidente Donald Trump, quien busca estigmatizar la presencia de migrantes en Estados Unidos con el objetivo de aumentar su popularidad frente al electorado tal como lo hizo hace ocho años, cuando ganó la presidencia de su país.
Mientras tanto, el flujo migratorio continúa llegando a la frontera entre México y Estados Unidos, donde en los últimos días se ha reportado el cruce diario de más de 10 mil personas migrantes.
México apuesta por atender las causas de la migración
Por su parte, el presidente López Obrador ha acusado a los políticos estadounidenses de utilizar el tema de la migración con tintes electorales. Al mismo tiempo, el mandatario mexicano ha buscado implementar diversos programas que logren atender las causas que originan la necesidad de migrar hacia Estados Unidos desde países de Centroamérica y el Caribe.
En este sentido, el gobierno federal de México ha implementado el programa “Sembrando vida” en El Salvador y Honduras, donde se ha logrado reducir el flujo migratorio. Sin embargo, ante las nuevas olas migratorias que se dirigen hacia Estados Unidos, López Obrador convocó a una cumbre en la que participaron 11 países de la región y cuya finalidad fue trabajar de manera conjunta en áreas prioritarias como la autosuficiencia alimentaria, el combate al crimen organizado y la autosuficiencia sanitaria.
De acuerdo a lo expresado de manera reiterada por el mandatario mexicano, resolver estos problemas es atender de manera directa las causas que originan la migración, por lo que los esfuerzos deben concentrarse en ellas y no en medidas coercitivas una vez que la migración se realiza.
De manera más reciente, la actual administración busca consolidar una estrategia de atención a los migrantes enfocada en la política humanista propuesta por el titular del ejecutivo mexicano. Con esto en mente, se han creado grupos de trabajo a nivel federal que cubrirán aspectos como la gestión de la migración irregular, las vías de movilidad laboral y bienestar y la atención a comunidades mexicanas en el exterior.