Durante su habitual conferencia matutina desde Palacio Nacional el presidente López Obrador resaltó algunas de las acciones de gobierno que se han logrado implementar gracias al combate a la corrupción practicada durante los sexenios pasados.
06/05/2024 (Ciudad de México). “La corrupción no sólo hay que combatirla por razones de índole moral, sino porque es una fuente de financiamiento para el desarrollo”, afirmó el presidente López Obrador previo a una exposición en la que señaló cómo la austeridad de su gobierno y el combate a la corrupción ha permitido realizar múltiples obras en beneficio de la población.
Como primer ejemplo, el mandatario señaló que tan sólo con la venta del avión presidencial, comprado por el expresidente Felipe Calderón y utilizado por Enrique Peña Nieto, significó la construcción de dos hospitales, uno en Oaxaca y otro en la Montaña de Guerrero, una de las regiones más pobres del país.
Entre otros de los excesos así considerados por el mandatario señaló el gasto que realizaban organismos como ProMéxico, encargado de promocionar turísticamente al país en el mundo, pero donde la mayoría de quienes allí trabajaban eran “puros recomendados, pura gente vinculada a los funcionarios públicos”, además de tener un presupuesto por más de 8 mil millones de pesos producto del impuesto especial a turista y el cual sólo usaban “para pagar los convenios de publicidad con la prensa y medios de información, y se robaban una buena cantidad de ese dinero”.
Además, reiteró que los altos funcionarios del gobierno tenían prestaciones muy superiores a la de los mandos medios, por lo que la eliminación de todos esos privilegios le permitió a su gobierno incrementar la inversión en el bienestar social de la población.
Las acciones contra la corrupción realizadas por el Gobierno Federal
Dividido en tres rubros, el tabasqueño expuso las principales líneas de acción de su gobierno. Como primera de ellas señaló que los programas del Bienestar han llegado a casi el 90% de los hogares del país.
Como segundo elemento destacó que en sexenio anteriores la inversión pública era de 500 mil millones de pesos, mientras que durante su administración se ha duplicado, permitiendo desarrollar obras en el sureste del país.
En este punto resaltó que antes se realizaba menos obra pública ya que para su construcción “entregaban concesiones para hacer autopistas de paga; además de que pagabas impuesto, cuando necesitabas un servicio tenías que volver a pagar”.
Finalmente, mencionó que las Fuerzas Armadas han contribuido a realizar las obras públicas a un menor costo y con un costo menor. Como ejemplo refirió las dos mil 750 sucursales del Banco del Bienestar en donde la población puede recibir de manera directa los programas sociales, los aeropuertos internacionales Felipe Ángeles en el Estado de México y el de Tulum, en Quintana Roo, el Tren Maya, además de 10 hospitales públicos; todo ellos enmarcado en la cuarta misión del ejército mexicano consistente en “contribuir al desarrollo de México”.
Por todo lo anterior, el titular del Ejecutivo consideró que el combate a la corrupción ha obtenidos logros tangibles como la reducción de la pobreza, el aumento del empleo y del salario, la implementación de programas para los jóvenes que estudian o a quienes se emplean por primera vez, así como se ha evitado la implementación de “gasolinazos”, el aumento de impuestos o el endeudamiento con organismos internacionales.