31/10/2024 (Ciudad de México). Seguramente en el peor momento de la revolución cubana, en treinta años que la ONU viene respaldando su soberanía nacional, nuevamente la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas, con el contundente apoyo de 187 países, condenó el bloqueo económico impuesto por el gobierno de Estados Unidos a Cuba. 

Sólo votaron en contra Estados Unidos e Israel, dejando en evidencia que, en este tema, Washington sólo es secundado por el régimen genocida de Tel Aviv. 

Se trata de una trascendental victoria diplomática de Cuba, que atraviesa por un período de estancamiento económico, sufre una crisis energética y es continuamente golpeada por huracanes, pero mantiene intacta la dignidad de su pueblo y sigue luchando por salir de tan mala situación sin someterse.        

Pero las buenas noticias para unos fueron como la maldición para otras. En Argentina, el presidente Javier Milei despidió de manera abrupta a su canciller, Diana Mondino, luego de que la representación argentina votara a favor de Cuba, durante la Asamblea General de las Naciones Unidas que aprobó ayer una resolución pidiendo el levantamiento del bloqueo a la isla rebelde. 

Ya hubo un precedente de esta destitución. Hace dos semanas, por instrucciones de la Casa Rosada (Palacio de Gobierno), Mondino cesó al representante permanente de Argentina ante la ONU, el embajador Ricardo Lagorio. Ya entonces Milei advirtió que la Cancillería no estaba plenamente controlada por Mondino, a quien también desde hace algún tiempo dejó de invitarla para que le acompañe en sus viajes internacionales. 

Diana Mondino, en rigor, no tenía ninguna trayectoria en el servicio exterior de su país. Su perfil profesional de economista con muy buenas relaciones dentro de la burguesía financiera de su país (es propietaria, junto a su hermano Guillermo, del Banco Roela), le sirvieron para hacer una rápida carrera política, no exenta de declaraciones que mostraban preocupantes niveles de ignorancia: el 31 de octubre de 2023, durante una entrevista con el periodista Luis Novaresio, afirmó que “el matrimonio igualitario es igual a tener piojos”. 

Con todo y estas controversias, o tal vez precisamente por ellas, habiendo sido elegida diputada en noviembre de 2023 por la ciudad de Buenos Aires, luego de asumir la presidencia, Milei le pidió que renunciara a su curul legislativo y asumiera la Cancillería.

Como encargada de las relaciones exteriores de su país, Mondino no logró absolutamente nada relevante, al punto que sólo será recordada por haber firmado la carta con la que Argentina rechazó la invitación a ser parte de los BRICS, apenas asumió el cargo.

El vocero presidencial, Manuel Adorni, sin dar mayores explicaciones sobre la destitución que hizo Milei de una funcionaria de primera línea, sólo afirmó que la política exterior la define el primer mandatario y que “nuestro norte en política internacional es el alineamiento con Estados Unidos y con Israel”. 

En Buenos Aires, analistas en relaciones exteriores criticaron que Milei, llevado por su ideología neofascista, está aislando a Argentina en los foros mundiales. Ya ocurrió durante la “Conferencia Mundial sobre Equidad de Género”, realizada en Brasil hace poco, donde Argentina fue el único país que no firmó la declaración final del evento. En esto Mondino sí fue coherente con el regresivo lineamiento presidencial, ya que ella misma es militante antifeminista que festejó (sí, festejó) el cierre del Ministerio de la Mujer en su país.

Mientras estas fisuras ocurren a nivel del gobierno, la situación interna del país rioplatense sigue mostrando un incremento alarmante de la pobreza como efecto del ajuste ultraliberal que implementa la administración mileista.