Este fin de semana, Guatemala despertó con una noticia que ha cimbrado a la sociedad: la Corte de Constitucionalidad ordenó al Tribunal Supremo Electoral (TSE) no hacer oficiales los resultados de la primera vuelta electoral del pasado 25 de junio.

Pero no sólo eso. La Corte ordenó una nueva revisión de votos con el argumento de “cotejar las actas impugnadas con las que se introdujeron al sistema de cómputo”  y agregó que, de ser necesario, se realice un nuevo conteo. Asimismo, concedió un amparo provisional a nueve partidos políticos, todos ellos pertenecientes a la derecha, y trasladó el expediente a la Corte Suprema de Justicia.

Esta noticia se da una semana después de que se realizaron las elecciones y en donde la centroizquierda se coló como opción para la segunda vuelta, con la dupla de Bernardo Arévalo y Karin Herrera del Partido Movimiento Semilla, frente a la empresaria Sandra Torres del Partido de la Unidad Nacional de la Esperanza, quien obtuvo mayor porcentaje de votos.

Ante esa situación, Arévalo y Herrera acudieron a la Corte para interponer tres recursos: apersonamiento y solicitud de tercería, con el objetivo de participar dentro del amparo. También una solicitud de aclaración y ampliación de la resolución emitida por parte de la Corte de Constitucionalidad. Por último, una solicitud de revocatoria del amparo provisional.

 “Estamos actuando en defensa del voto y estamos actuando en el marco de la legislación existente, a pesar de que esta legislación está siendo vulnerada por muchas de las decisiones tomadas”, expresó el candidato de Semilla.

¿Qué dice la Corte de Constitucionalidad?

 La Corte de Constitucionalidad señaló que se deberá llevar a cabo una audiencia para que se convoque a una nueva revisión de escrutinio de votos en las juntas electorales departamentales y del Distrito Central.

También agregó que la Corte Suprema de Justicia será la que lleve la interposición del recurso, para constituir en tribunal de amparo y “continúe con el trámite de garantía constitucional instada”.

Con esto, deberá realizarse un análisis de las actas que han sido cuestionadas en Guatemala y Distrito Central, por lo que queda abierta la posibilidad de realizar un nuevo conteo de votos.

Por tanto, ordenó suspender la calificación y oficialización de resultados a efecto de que, para la fecha prevista para la segunda vuelta para elección presidencial, “todo haya quedado debidamente depurado”, de acuerdo con su comunicado.

El Tribunal, a las pocas horas de la decisión de la Corte, informó a través de un comunicado que resolvió atender el amparo y que se suspendía la calificación y oficialización de resultados de Elecciones Generales.

Y es que desde la noche del viernes nueve partidos (CAMBIO, MI FAMILIA, VALOR, PODEMOS, VAMOS, CREO, UNE (Partido de Sandra Torres), CABAL Y AZUL) presentaron un amparo argumentando que hubo cifras erróneas en las sumas de las actas y se registraron tachones en documentos.

No oficializar los resultados, un peligro para la democracia guatemalteca

“La decisión que ha tomado la Corte contraviene al proceso electoral, ya que no tiene competencia ni sustento legal”, aseguró Bernardo Arévalo en conferencia de prensa, y agregó que esa decisión amenaza la segunda vuelta del 20 de agosto y es un “golpe a la democracia”.

El candidato de Semilla, en una conferencia que hizo de urgencia luego de que se dio a conocer la decisión de la Corte, rodeado de simpatizantes que gritaban consignas de apoyo como “En las urnas, no en las Cortes”, “Mi voto se respeta” y “No nos callarán”, expresó que “los mafiosos corruptos tienen los días contados y que no permitirán que se estafe al pueblo guatemalteco”.

Por su parte, la candidata Sandra Torres (UNE) no se opuso ante el fallo y señaló que “no estamos pidiendo que se anulen las elecciones ni que se repitan las votaciones, sino sólo un cotejo”.

¿Qué dice la comunidad internacional?

Antony Blinken, secretario de Estado de Estados Unidos, apoyó el derecho del pueblo guatemalteco a elegir a sus representantes políticos por medio de “elecciones libres y justas” y que se encontraba muy preocupado por los esfuerzos que interfieren en los resultados de las elecciones”. Washington afirma que socavar los comicios amenazaría a la democracia de este país y tendría implicaciones de largo alcance.

Por su parte, la Misión de Observación Electoral de la Unión Europea (MOE-UE), así como la Misión de Observación Electoral de la Organización de Estados Americanos, pidieron que los resultados se respeten y que los partidos políticos cumplan con los procedimientos establecidos para impugnar los resultados de las mesas de votación y acaten las resoluciones emitidas por sus autoridades electorales.