El INEGI reportó un aumento del 9% en la remuneración que perciben los trabajadores del sector informal; además, el organismo señala un incremento del 4.6% interanual en el Valor Agregado Bruto de este sector.

29/02/2024 (Ciudad de México). La economía informal, en su índice de Valor Agregado Bruto (VAB) creció un 4.6% interanual, superando los 5.6 billones de pesos durante el último trimestre analizado (Julio-Septiembre 2023), reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

Segmentado por estados, el mayor crecimiento anual de este sector se dio en Campeche, con 18.%; Sinaloa, con 11.8%; Colima, con 11.2%; y Oaxaca, con 9.6%. En contraste, los estados de Guanajuato, Baja California Sur, Tamaulipas y Veracruz presentaron un decrecimiento.

Junto a estos datos, el organismo también informó que en el mismo periodo de tiempo hubo un aumento de las personas laborando en este sector, alcanzando un total de 16.3 millones, quienes además tuvieron un aumento del 9% en sus remuneraciones.

La población considerada dentro de este sector es aquella que labora en empresas sin personalidad jurídica propiedad de los hogares o en unidades económicas formales, pero sin contar con seguridad social ni prestaciones, tales como vacaciones, aguinaldo, liquidación, etc.

Dentro del informe presentado, también se encuentra la reducción del desempleo, misma que baja a 2.7% de la población económicamente activa (PEA) y dentro de la cual el 54.1% corresponde al sector informal en sus diversas modalidades.

Dentro del sector informal, la variedad de actividades que se realizan son innumerables y van desde trabajar en un establecimiento comercial sin estar dado de alta ante el Seguro Social (IMSS) o tener un puesto en la vía pública para vender distintos productos.

De entre las personas que trabajan en este sector, hay quienes afirman que han optado en trabajar por su cuenta porque “los salarios están muy bajos y con lo que pagan no alcanza y porque [aquí] gano dos veces el salario mínimo”, afirma Raúl, quien desde hace años recorre diversos parques de la Ciudad de México para ofrecer sus productos, una mezcla de frutas preparadas al gusto de cada cliente.

Sin embargo, ejercer su actual actividad no está exenta de dificultades, pues él vende en las calles y parques de la ciudad y esto puede provocar que las autoridades de las Alcaldías “te levanten por andar vendiendo en la vía pública y uno tiene que darles para el refresco”, con el riesgo de que confisquen sus productos y sean detenidos.