28/09/2023 (Ciudad de México). Luego de varias semanas en que el presidente colombiano Gustavo Petro ha estado desplegando una nutrida agenda internacional que lo llevó a Bruselas, a la Cumbre de la Unión Europea con la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC), luego a Belem do Pará (Brasil) a la Cumbre Amazónica, posteriormente a La Habana (Cuba) a la reunión del G-77+China y finalmente a Nueva York, a la Asamblea General de la ONU, volvió a dedicar esfuerzos de política interna en Colombia, luego de que hace unos días ocurriera un atentado con coche bomba contra el corregimiento de Timba, en Buenos Aires (Cauca), que destruyó una estación de Policía en un ataque que resultó en la muerte de varias personas. Esto motivó a que el presidente invite a la ciudadanía a “moverse por la vida” a través de acciones de resistencia pacífica y solidaridad unitaria frente a la violencia.

Y fue en Bogotá, la ciudad capital, a convocatoria coordinada tanto del gobierno de izquierda como del conjunto de organizaciones sociales que respaldan el actual proceso político de transformaciones, que se realizaron marchas por la paz y también de respaldo a las reformas de Petro.

Se encolumnaron en las calles y avenidas los representantes de comunidades indígenas que llegaron de todo el país desde el día lunes, trabajadoras y trabajadores del sector educativo, de salud, de servicios, que son afiliados a las centrales obreras, grandes contingentes de jóvenes universitarios y de los barrios periurbanos, organizaciones de mujeres, plataformas de defensa de la paz y los derechos humanos, colectivos ecologistas y de la diversidad sexual, y por supuesto partidos políticos de izquierda. Al iniciar la tarde del miércoles al menos cuatro marchas convergieron en la histórica Plaza Bolívar, cercana al palacio presidencial. Fueron decenas de miles de personas que abarrotaron la explanada respondiendo al llamado a la concertación.  

Según la activista bogotana Carmen Arteche, que milita hace décadas por la paz en Colombia pues perdió a uno de sus hijos en el conflicto armado, en la Plaza Bolívar justo enfrente del viejo edificio del Capitolio Nacional, donde funciona el Congreso: “se escucharon gritos y consignas exigiendo al Congreso, en el que las bancadas de la derecha son mayoría, que acompañe las políticas de paz del presidente, y que de una buena vez apruebe las leyes de reforma del sistema de salud, de reforma del sistema de pensiones y una nueva legislación laboral. La iracundia y la bronca ya se empiezan a sentir en estas movilizaciones, ya que viene a ser la tercera vez que marchamos hacia el Congreso, sin que nos escuchen. Puede que las siguientes protestas sean más radicales y hasta violentas, pese al discurso moderado del presidente”.

Precisamente en su discurso ante la multitud, Petro dijo: “Desde esta plaza llena de gente, desde las plazas de Colombia, yo interpelo a la oligarquía colombiana, a quienes tienen el poder económico, para que hagamos un gran acuerdo nacional sobre la verdad y la justicia”.

Instó a mantener la movilización, pues “sólo así habrá cambios en Colombia”. Dijo también que él fue elegido por el pueblo, por lo que tiene la obligación de acompañar al pueblo en sus manifestaciones democráticas. Horas después, dejó deslizar un comentario en sus redes sociales, comentando que el presidente de Estados Unidos, Joa Biden, también acudió a un piquete de huelga de los trabajadores automotrices en Michigan.

Las crónicas periodísticas indicar que, al caer la tarde, la gente se fue desconcentrando, tras protagonizar una marcha que se caracterizó por su colorido y diversidad, y luego de escuchar a varios grupos musicales como Aterciopelados, Systema Solar, La 33, La Pacífican Power, Rap Bang Club, Plu con Plá, Lucía Vargas, Ácido Pantera, Raúl Numerao y Pasajeros. Puede que algunos de esos nombres sean extraños para el público no colombiano, pero a nivel local tienen mucho arrastre y su presencia en el acto es muestra de que Petro conserva un importante respaldo social y cultural.