16/08/2023 (Ciudad de México). Durante la noche del viernes, cinco jóvenes originarios de Lagos de Moreno asistieron a la feria de San Juan de los Lagos. Ambos municipios se encuentran en la región de Los Altos de Jalisco a una hora de diferencia, una zona que ha presentado varios casos de violencia relacionada con las organizaciones criminales.
Luego de la feria, los cinco jóvenes habían avisado a sus familias que pasarían al “Mirador” antes de regresar a casa, una actividad frecuente entre en aquella región. Sin embargo, un amigo que habría de encontrarse con ellos reportó a sus familiares que no acudieron a la cita, lo cual los alertó.
Ante ello, familiares generaron un reporte a través del 911 y, para el sábado 12, asistieron a la agencia del ministerio público (MP) que se encuentra en San Juan de los Lagos para denunciar la desaparición. A raíz del reporte, autoridades encontraron el auto de uno de los jóvenes cerca de donde se les vio por última vez. De ello se desprendió un operativo en un inmueble aledaño en el que las autoridades encontraron armas de fuego y motonetas.
Más adelante, durante la madrugada del martes 15 de agosto, se reportó el incendio de otro auto en las inmediaciones del tramo carretero de Encarnación de Díaz–Lagos de Moreno. Las autoridades confirmaron que se trataba de un segundo vehículo perteneciente a los jóvenes e informó que en él se encontraron “restos humanos”.
En un inicio, las autoridades clasificaron el caso como uno de “desaparición voluntaria” ya que, según Ricardo Sánchez Beruben, coordinador general estratégico de Seguridad en Jalisco, no había indicios de que se tratara de un hecho violento. Sin embargo, luego de encontrar el segundo auto, las autoridades tuvieron que reclasificar el hecho y apuntar a la desaparición no voluntaria.
Este martes 15 de agosto, la Fiscalía General del Estado (FGE) ofreció una conferencia de prensa en la que dio detalles de la investigación, aunque no han arrojado resultados sobre el paradero de los jóvenes. El fiscal Luis Joaquín Méndez Ruiz señaló que habían desplegado “operativos de búsqueda” con 50 elementos, además de estar revisando las cámaras del C-4 y realizando la investigación de campo pertinente para conocer su paradero.
Por su parte, la fiscal Especializada en Personas Desaparecidas de Jalisco, Blanca Jacqueline Trujillo Cuevas, abordó el tema de la fotografía y el video que circularon en redes sociales. En la fotografía se puede observar a cinco jóvenes con evidentes heridas que parecen coincidir con los perfiles de los jóvenes. Destacó que, aunque los familiares de uno de los jóvenes señalaron que existe una “gran posibilidad” de que se trate de uno de los desaparecidos, las autoridades continuarán con las indagatorias y no descartarán líneas de investigación.
Finalmente, el coordinador general de Seguridad, Carlos Berumen, apuntó que, debido a que los indicios sugieren que se trata de un delito relacionado con la delincuencia organizada, solicitó a la Fiscalía General de la República la atracción del caso.
Los hechos ocurren mientras se ha gestado una crisis de seguridad en Jalisco relacionada con las desapariciones, particularmente de personas jóvenes. En lo que van del año, al menos cinco casos se han registrado, contando entre ellos el del pasado viernes.
Justo a finales del 2022 se registró el primer caso, cuando tres mujeres y un hombre de Colotlán fueron desaparecidas mientras se dirigían a Jerez, Zacatecas. Para el 18 de enero de este año fueron halladas sin vida.
El 27 de junio, por su parte, fueron víctimas de desaparición cuatro jóvenes originarias de Aguascalientes en el municipio de Encarnación de Díaz, también en la región de Los Altos Jaliscienses. Sin embargo, aún no se ha dado con su paradero.
A fines de junio se registró el caso del “call center” en el que, durante distintos días, fueron desaparecidos y asesinados siete jóvenes que trabajaban en un mismo establecimiento en Zapopan, Jalisco. Del caso no se ha desprendido ningún detenido hasta la actualidad, salvo por el arrendador del establecimiento que ya fue puesto en libertad.
En este contexto, el gobierno de Jalisco ha tenido un actuar cada vez más negligente y revictimizante. En un momento, en De Raíz Media dimos cuenta que el gobierno estatal no había registrando las cifras de manera adecuada, lo que ha impedido conocer la magnitud de un problema cuya información disponible es de por sí alarmante.
De hecho, durante el fin de semana, el colectivo de familiares de desaparecidos Luz de Esperanza denunció al gobierno de Jalisco por impedir pegar carteles de búsqueda de las personas desaparecidas en el espacio público en Guadalajara, supuestamente para no afectar la imagen de la capital tapatía.
Además, el colectivo también denunció que, en la región de Los Altos jaliscienses, en donde han ocurrido la mayoría de los casos de desaparición de jóvenes descritos, se encuentran dos supuestos campamentos de organizaciones criminales en donde tendrían retenidas a unas 300 personas en contra de su voluntad. El secretario del colectivo, Héctor Flores González, señaló que, aunque las autoridades estatales ya cuentan con indicios sobre estos campamentos en donde se podrían encontrar personas desaparecidas, han sido completamente omisos.
Según el Registro de Personas Desaparecidas y No Localizadas, el estado de Jalisco es el segundo lugar en desapariciones durante lo que va del periodo de Enrique Alfaro, con 13 237 casos registrados desde el 6 de diciembre 2018, solo superado por el Estado de México. Sin embargo, si consideramos los casos acumulados desde 1967, Jalisco sería el primer lugar.
Los nombres de los jóvenes recién desaparecidos son Diego Alberto Lara, Roberto Olmedo Cuellar, Uriel Galván, Jaime Miranda y Dante Hernández.