Luego del asesinato del niño Dante Emiliano en Tabasco, la candidata presidencial de la oposición, Xóchitl Gálvez, ha buscado responsabilizar al presidente López Obrador. Este uso político de la tragedia no es el único que la ex senadora ha hecho, donde además del propósito electoral se destaca una tergiversación de la estrategia de seguridad.
24/05/2024 (Ciudad de México). Durante su conferencia matutina, el presidente López Obrador criticó a sus adversarios por traficar con el dolor humano “con propósitos politiqueros”, lo cual calificó de inmoral. Esto a raíz del uso electoral que la candidata de oposición, Xóchitl Gálvez, ha hecho del caso del niño Dante Emiliano, quien fue asesinado en Tabasco.
En palabras de la ex senadora durante un mitin proselitista en Iztapalapa, el asesinato del menor es responsabilidad del presidente pues él “ha entregado este país a los criminales” y afirma que ella será la presidenta más valiente para proteger a los ciudadanos.
Sin mencionarla por su nombre, López Obrador cuestionó “¿Qué no pueden convencer de otra manera? ¿Tienen que mostrar su inmoralidad, su deshonestidad?”
Sobre el caso del menor, el presidente ha declarado que es muy lamentable el suceso e informó que ya “se están haciendo las investigaciones, ya se tiene avances para detener a los responsables”.
Por el uso que la oposición hace de este tipo de hechos, el mandatario declaró que en las elecciones se podrá saber si este tipo de campañas sucias les funciona. Además, cuestionó si “¿Son determinantes en una elección los medios de información y en especial de manipulación?”
El lucro con la violencia
El caso de Dante Emiliano no es el único del que la oposición ha echado mano durante sus campañas electorales. En Marzo de este año, Xóchitl Gálvez también utilizó el secuestro de 66 personas en Sinaloa para criticar la política de seguridad del presidente López Obrador.
Durante un mitin en la Ciudad de México, la panista afirmó que “efectivamente, estas cosas [el secuestro] suceden, pero ocurren cuando se les dan abrazos a los criminales y no nos ponemos del lado de las víctimas”, buscando crear la percepción que la estrategia de seguridad “abrazos no balazos” promovida por López Obrador consiste estar del lado de los criminales, cuando en repetidas ocasiones el titular del Ejecutivo ha señalado que su estrategia es atender las causas que generan la violencia, principalmente la atención a los jóvenes, a quienes estarían destinados los abrazos en forma de apoyos y oportunidades de empleo.
Recientemente, otros actores políticos también han buscado menoscabar la imagen de sus adversarios, como es el caso de la senadora por el PAN, Lilly Téllez, quien responsabilizó al candidato presidencial de Movimiento Ciudadano, Jorge Álvarez Maynez, por el accidente suscitado durante un acto de campaña en Nuevo León esta semana.
Por este caso, la legisladora publicó en redes sociales que Maynez “es un COBARDE que corrió” ante el desplome del templete donde se realizaba el acto de campaña.
Téllez actualmente busca su reelección como senadora por el estado de Sinaloa. Entre las declaraciones que ha hecho durante su periodo de campaña se encuentra la aseveración de haber recibido un chaleco antibalas de manera anónima, pero agradeciéndole esto a algún supuesto empresario, para luego poner en duda la seguridad que la Guardia Nacional ha desplegado para todas las candidaturas durante el actual proceso electoral.