Esta medida fue anunciada por el Departamento de Seguridad Interna de Estados Unidos tan sólo unas horas después de que el presidente Donald Trump firmará diversos decretos en contra de millones de personas que alimentan la fuerza laboral de su país.
23/01/2025 (Ciudad de México). La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha condenado enérgicamente la autorización por parte del gobierno de Estados Unidos de redadas en iglesias, escuelas y hospitales en busca de migrantes indocumentados, calificándolas como una violación flagrante de los derechos humanos y de los principios fundamentales de respeto y dignidad.
Esta medida fue anunciada por el Departamento de Seguridad Interna de Estados Unidos tan sólo unas horas después de que el presidente Donald Trump firmará diversos decretos en contra de millones de personas que alimentan la fuerza laboral de su país. La prohibición que los agentes federales de migración tenían para realizar arrestos y otras operaciones en el país data de 2011 y fue impuesta por el mismo Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). Posteriormente, en 2021, el entonces presidente Joe Biden reforzó esta restricción.
Con la eliminación de esta prohibición, la administración de Trump espera cumplir con su promesa electoral de deportar a un millón de migrantes que entraron a Estados Unidos sin la documentación correspondiente. Esta medida va acompañada del cierre de su frontera sur, para lo cual se ha ordenado el despliegue de mil 500 soldados adicionales en su frontera con México, sumando un total de 2 mil 200 militares en la zona, una cifra aún pequeña en comparación con los 15 mil efectivos que Trump quiere desplegar en la zona. A la par, entre los decretos firmados se encuentra uno para suspender la entrada de cualquier migrante a su país desde la frontera común con México.
El magnate neoyorquino no está sólo en esta embestida contra la migración. En paralelo, el gobernador de Texas, Greg Abbott, ha iniciado la ampliación del “muro flotante” sobre el río Bravo, en la frontera entre Eagle Pass y Piedras Negras, Coahuila. En lo inmediato, el texano ordenó 600 metros más a la barrera de boyas de metro y medio de altura y sujetas al lecho del río con pilotes de una tonelada.
México responde con enfoque humanitario
Ante este panorama, México ha implementado diversas acciones para atender la situación migratoria. En el norte, la Secretaría de Bienestar ha iniciado la construcción de un mega albergue en Nuevo Laredo, Tamaulipas, con capacidad para recibir a los connacionales que sean deportados de Estados Unidos. En el marco del programa “México te abraza”, este espacio brindará alojamiento y servicios básicos a los repatriados, facilitando su reintegración al país.
De igual manera, en Mexicali, Baja California, elementos de la Marina han comenzado a instalar carpas que servirán de refugio para los repatriados, garantizando condiciones dignas de estancia temporal. Entre los apoyos que el Gobierno federal brinda a las personas repatriadas se encuentran 100 autobuses que les facilitarán el regreso a sus comunidades de origen, además de la Tarjeta Paisano Bienestar con 2 mil pesos para que puedan cubrir sus necesidades más apremiantes.
En otro punto de la fronte, en Nogales, Sonora, se ha habilitado la unidad deportiva “Estrellas Nogalenses” como centro de atención para recibir a los deportados, ofreciendo un espacio seguro y adecuado para su llegada. Todas estas acciones son coordinadas y supervisadas directamente por los titulares de las secretarías que conforman el gabinete presidencial. Además, las autoridades estatales y municipales trabajan en estrecha comunicación para atender a todo aquel connacional que así lo necesite e, incluso, a los hermanos latinoamericanos que se hayan visto afectados por la cancelación del sistema CBP One, a través del cual podían ingresar a Estados Unidos mientras esperaban se resolviera su proceso de asilo.
En el sur del país, el fenómeno migratorio también se hace presente. La Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), con más del 58% de solicitudes de asilo pendientes por dar respuesta, enfrenta ahora una nueva ola por parte de las personas migrantes provenientes de los distintos países de Centro, Sudamérica y el Caribe. Para finales del año pasado, 78 mil 975 personas iniciaron su trámite de refugio ante esta entidad, por lo que 45 mil 805 migrantes aún se encuentran a la espera de una respuesta oficial que les permita transitar sin tantas dificultades por el territorio mexicano.