21/01/2025 (Ciudad de México). Durante el primer semestre de 2024, México registró una tasa de 11.7 homicidios por cada 100 mil habitantes, según datos preliminares del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). El documento señala el conteo de 15 mil 243 homicidios durante dicho periodo, lo que representa una reducción en comparación con el mismo periodo de 2023, cuando 15 mil 982 personas fueron asesinadas, lo que significó una tasa de 12.4 por cada 100 mil habitantes.

El desglose por género muestra que, del total de homicidios, el 88% correspondió a hombres y el 12% a mujeres, con tasas de 21.2 y 2.6 homicidios por cada 100 mil habitantes, respectivamente. Al respecto, se ha advertido que si bien hay muchos más hombres que mueren por violencia derivada de conflictos armados, ajustes de cuentas o con participación en grupos criminales, en las muertes violentas de mujeres se observa una mayor prevalencia de razones de género.

Además, se destaca que el 73% de los homicidios fueron perpetrados con disparos de arma de fuego, consolidándose como el principal medio utilizado. Las punzocortantes fueron la segunda causa más común, con un 9.1% de los homicidios. En cuanto a la proporción por género en este rubro, es relevante que mientras 8 hombres son asesinados con algún objeto punzocortante, en el caso de las mujeres de de 12 por cada 100. Otra diferencia destacada es que por cada hombre asesinado mediante asfixia o estrangulamiento, tres mujeres son asesinadas de esta forma. El informe también señala que en este periodo 2 mujeres fueron asesinadas por motivo de una agresión sexual con fuerza corporal, mientras que ningún hombre falleció por esta causa.

Tendencia a la baja durante los último años

En suma, el informe muestra una reducción del 4.7% en tan sólo un año. Esta tendencia a la baja se ha mantenido por tercer año consecutivo, evidenciando los esfuerzos continuos en materia de seguridad pública. La disminución en este índice coincide con las estrategias de seguridad implementadas durante el sexenio del hoy ex presidente López Obrador.

Durante la administración pasada, la estrategia de seguridad del Gobierno federal se centró en abordar las causas estructurales de la violencia, consolidar la Guardia Nacional, fortalecer la inteligencia y la investigación, y coordinarse con las autoridades estatales que así lo permitían. Entre estas acciones se encuentran la implementación de programas sociales como “Jóvenes Construyendo el Futuro” y “Sembrando Vida” para ofrecer oportunidades a los jóvenes y alejarlos de la delincuencia, bajo la visión de ofrecer “abrazos” a los jóvenes y no “balazos” a quienes se encargaban de reclutarlos entre las filas del crimen organizado.

Actualmente, la presidenta Claudia Sheinbaum ha presentado una estrategia de seguridad que ahonda en este enfoque basada en cuatro pilares: atención a las causas, fortalecimiento de la Guardia Nacional, mejoras en las acciones de inteligencia e investigación, y mayor coordinación interinstitucional y con las autoridades estatales y municipales.

La mandataria ha enfatizado la importancia de abordar las causas estructurales de la violencia, como la pobreza y la desigualdad, y ha implementado programas para apoyar a las familias vulnerables y crear oportunidades para los jóvenes. Además, impulsó la reforma que le confirió facultades de investigación a la Secretaría de Seguridad y Atención Ciudadana y ha creado un Sistema Nacional de Inteligencia para mejorar la detección de redes criminales.