De acuerdo al Tratado de Aguas de 1944, México tiene el compromiso de enviar 2 mil 160 millones de metros cúbicos de este líquido a Estados Unidos en un lapso de 5 años. Ante la falta de 86 millones por entregar, legisladores texanos piden a su congreso federal congelar los fondos comprometidos con México. Por esta acción, el presidente López Obrador advierte que tiene como trasfondo el periodo electoral en el país vecino del norte.

15/05/2024 (Ciudad de México).Como hay elecciones y calor, salen todos estos temas”, señaló el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, para referirse a la reciente exigencia de un grupo de legisladores texanos al Congreso de Estados Unidos para que se congele los fondos asignados a México ante un supuesto incumplimiento en el tratado de aguas entre ambos países. Esto, durante el periodo electoral en el país vecino.

Además, el mandatario mexicano agregó que “todavía no hay una fecha que se esté cumpliendo para tomar alguna decisión”. Esto, en relación a que la fecha límite para cumplir con la entrega de agua estipulada en el convenio es hasta Octubre del próximo año.

Dentro de este acuerdo se destaca que México tiene el compromiso de enviar 2 mil 160 millones de metros cúbicos de agua en un periodo de cinco años, de los cuales aún hacen falta más de 86 millones, según reportan medios locales.

De acuerdo al calendario electoral de Estados Unidos, actualmente en Texas se realizan elecciones primarias con miras a definir a los candidatos que participarán en la contienda electoral del próximo Noviembre, donde, a semejanza con México, se renovará su Poder Ejecutivo y Legislativo.

Se respeta el Tratado de Aguas de 1944: López Obrador

El tratado al que se hace referencia data de 1944 y fue firmado por el entonces presidente Manuel Ávila Camacho, con el cual “estamos de acuerdo que no se modifique”, declaró López Obrador.

Además, señaló que se mantienen buenas relaciones con el país vecino del norte y que hay una revisión constante en el manejo del agua situada en la frontera en común. Por otro lado, destacó que siempre es mejor el diálogo para resolver cualquier posible diferencia, ya que “nos necesitamos mutuamente” y recordó que las acciones que inhiben el flujo entre ambos países perjudica no sólo a los empresarios mexicanos, sino también a los estadounidenses, incluidos los texanos.

Finalmente, el mandatario reconoció que el gobernador de Texas, Greg Abbott, “ha estado moderado, porque antes tenía una política muy agresiva en contra de migrantes y en contra de mexicanos”. Esta política, agregó López Obrador, consistía en hacer muros flotantes sobre el río Bravo con púas y alambradas, mismos que causaron la pérdida de la vida de migrantes en su intento por cruzar la frontera.