08/09/2023 (Ciudad de México) Este siete de septiembre el gobierno de Texas, encabezado por el gobernador republicano Greg Abbott, consiguió frenar la decisión del juez David Ezra que concedía un plazo de nueve días para retirar las boyas instaladas en el Río Bravo, con el fin de impedir el paso de migrantes indocumentados.

Apenas ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador celebraba la decisión, cuando esta mañana en conferencia de prensa informó que un tribunal de apelaciones de Texas permitió una suspensión temporal a dicha orden, hasta que se realice una revisión adicional del caso.

“Continúa el juicio. Y lo vamos a ganar. Lo va a ganar el gobierno del presidente Biden, va a llevar tiempo pero es completamente imprudente lo que está haciendo el gobierno de Texas y además inhumano”.

Andrés Manuel López Obrador, presidente de México.

El dictamen del juez Ezra, que indicaba el retiro de las boyas, argumentaba que la presencia del “muro flotante” de 300 metros lineales que va de Eagle Pass hasta Piedras Negras en México carecía de evidencia comprobable de que hubiera reducido significativamente la migración ilegal.

Señaló otros daños colaterales como la afectación de flora y fauna de la región, riesgos que representa para la vida humana, la violación del derecho a la navegación libre y segura, así como las tensiones que genera en la relación bilateral entre Estados Unidos y México.

En la resolución el Juez reprendió a la administración de Greg Abbott por actuar sin autorización federal y prohibió el volver a colocarlas.

El “muro flotante” comenzó a instalarse en julio del presente año, se trata de esferas naranjas con púas, que tienen cerca de un metro de diámetro cada una, esto como parte de la llamada “Operación Estrella Solitaria”.

En respuesta el Gobierno de México ha enviado tres cartas diplomáticas ya que la mayoría de las boyas se encuentran en territorio mexicano, así lo confirmó La Comisión Internacional de Límites y Aguas.

A pesar de la intervención del presidente de Estados Unidos Joe Biden, continúan las acciones de Greg Abbott en oposición a la política migratoria que ha planteado Biden, 

violando de esta manera los tratados bilaterales.

En su cuenta de “X”, Greg Abbott, declara: “Esta pelea no ha terminado. Esto apenas ha comenzado”.

Sin embargo, la construcción de fronteras no naturales, y su afectación ambiental y política, no es algo nuevo por parte de autoridades estadounidenses. Ejemplo de ello el muro fronterizo de más de 724 kilómetros. Sobre este caso, esta semana la Oficina de Rendición de Cuentas de Estados Unidos presentó un estudio en el que denuncia la ausencia estudios ambientales previos, la violación a los derechos de las comunidades indígenas, profanando incluso los cementerios sagrados de los Tohono O’odham.