04/12/2023 (Ciudad de México). Israel ha reanudado, con un alto grado de potencia destructiva y causando gran número de muertos, sus bombardeos en la Franja de Gaza, esta vez dirigiendo sus ataques, que incluyen ahora incursiones de columnas de tanques, hacia la parte sur del enclave territorial, lanzando el primer ministro Benjamín Netanyahu la advertencia de que los desplazados deben abandonar también esta parte en que se refugiaron para salvar sus vidas.
Ya se sabía que lo único que pretendía lograr el gobierno israelí cuando aceptó la tregua negociada con la mediación de Qatar, era una válvula de escape a la presión interna de los familiares de los rehenes de Hamás. Al sionismo gobernante en Tel Aviv, que sostiene teorías supremacistas sobre el pueblo de Israel como el “pueblo elegido de Dios”, no le interesa el escrutinio internacional porque asume lo que está haciendo en Gaza (y también en Cisjordania) es una tarea sagrada.
Pero el repudio mundial al genocidio en Gaza se ha mantenido, con numerosas marchas favorables al pueblo palestino en todo el mundo. Es tan grande la repulsa que inevitablemente se volvieron virales las imágenes de hace unos días, en las que Michelle Taylor, la representante del gobierno de los Estados Unidos, aliado de Tel Aviv, cuando tomó la palabra en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, tuvo que soportar que gran parte de los asistentes le dieran la espalda.
En Washington, durante una conferencia de prensa este 3 de diciembre, el general Lloyd Austin, secretario de defensa del gobierno de Joseph Biden, advirtió del peligro de que Israel termine derrotado estratégicamente “si no protege a la población civil palestina”.
Hay que tomar en serio lo que dice Austin, tanto porque lo dijo en una comparecencia pública hablando como la autoridad que dirige todo el sistema bélico de los Estados Unidos, incluyendo el Pentágono, como por el hecho de que tuvo experiencia militar en Irak y Afganistán.
Austin ha viajado en numerosas ocasiones a Ucrania, donde se ha reunido con el presidente Zelensky y con todo el Estado Mayor ucraniano; ahora también está viajando bastante a Israel y tiene reuniones con el presidente Herzog (poder formal) y con Netanyahu (poder real). Estos itinerarios nos muestran la importancia de este personaje que, además, es experto en contrainsurgencia urbana. Lo que está sucediendo en Gaza puede compararse con lo que hizo Estados Unidos en los dos países que invadió y ocupó a sangre y fuego durante más de veinte años y de los que tuvo que retirarse dejándolos devastados y, en el caso de Afganistán, en manos del ultraconservador gobierno Talibán.
Volviendo a lo que dijo el jefe del Pentágono, Lloyd Austin recalcó que la población civil es el “centro de gravedad en este tipo de conflictos” y aseveró que si los echas en brazos del enemigo, sustituyes una victoria táctica por una derrota estratégica. “Por la experiencia que tuvimos en Irak con Isis, que tiene mucho parecido a Hamás, la lección es que en la guerra urbana sólo se puede ganar protegiendo a los civiles”.
Sería ingenuo pensar que el general ® Lloyd Austin se convirtió en un vocero de derechos humanos, porque cuando hace años el ejército estadounidense a su mando en Irak y en Afganistán no respetó los derechos fundamentales de las personas y cometió gran cantidad de violaciones al derecho internacional y humanitario. El secretario de defensa está expresando la preocupación de la Casa Blanca ante la posibilidad de que el escenario de conflicto en el Cercano Oriente se complique, tanto como ya se estancó y complicó el escenario de la guerra en Ucrania.