09/01/2025 (Ciudad de México). En diciembre de 2024 México registró una inflación anual de 4.21%, la más baja desde febrero de 2021, cuando se ubicó en 3.76%. Este descenso marca dos meses consecutivos de desaceleración en el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), con una inflación mensual de 0.38% para el último mes del año pasado.
De acuerdo al informe del organismo autónomo, la desaceleración de la inflación se debe en gran parte a la caída de los precios de las mercancías y de las mercancías no alimenticias. Por otra parte, si bien servicios como el transporte aéreo mostraron incrementos de hasta un 26.27% o de 8.32% en servicios turísticos en paquete, la moderación general en los precios ha sido un alivio para los consumidores.
A pesar de la desaceleración en la inflación general, la inflación subyacente, que excluye los precios más volátiles de alimentos y energéticos, registró un ligero repunte, ubicándose en 3.65% anual en diciembre, después de haber alcanzado 3.58% un mes antes. De acuerdo a especialistas, este comportamiento sugiere que, aunque la tendencia general es positiva, persisten presiones inflacionarias en ciertos sectores de la economía.
Los retos de la economía mexicana
Si bien la inflación anual estuvo por debajo de los cálculos hechos por entidades financieras como City Group, que la calcularon en 4.55%, la inflación aún se encuentra fuera del rango objetivo del Banco de México (Banxico), fijado entre el 3% y el 4%. Pese a eso, analistas económicos esperan que la tendencia a la baja continúe en 2025, especialmente si se mantiene una vigilancia constante ante posibles riesgos externos, como fluctuaciones en los precios internacionales de energéticos y alimentos, así como la volatilidad en los mercados financieros globales.
Por otro lado, con la actual desaceleración en la inflación, es previsible que Banxico continúe con su política de reducción de tasas de interés en los próximos meses con el objetivo de estimular la actividad económica. Recientemente, este organismo bajó la tasa de interés en 25 puntos para quedar en 10% a partir del 20 de diciembre de 2024. Con este recorte suman ya cuatro disminuciones de la misma magnitud en los últimos meses.
La importancia de estas tasas de interés y su control por parte de este organismo autónomo radica en que son un factor clave para estabilizar el sistema financiero, fomentar el desarrollo económico a partir de créditos bancarios e influir en el tipo de cambio entre las distintas divisas, por lo que su reducción es un indicador de la fortaleza de la economía mexicana.
