12/09/2024 (Ciudad de México). La ciudad de Culiacán, en el estado de Sinaloa, ha sido escenario de una creciente ola de violencia a casi dos meses de la detención en Estados Unidos de Ismael “El Mayo” Zambada, líder histórico del Cártel de Sinaloa. De acuerdo a las autoridades, los enfrentamientos tienen como protagonistas dos facciones del cártel, específicamente entre los seguidores de “El Mayo” y los llamados “Chapitos”, hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Hasta el momento, la Fiscalía estatal ha registrado el asesinato de nueve hombres, ocho heridos de bala, 14 denuncias por privación de la libertad y 16 por robo de automóviles. Por estos enfrentamientos, el gobernador de la entidad, Rubén Rocha Moya, ha ordenado la suspensión de actividades escolares y del transporte público en varias localidades como medida de prevención.
En respuesta a la crisis, el presidente López Obrador ha confirmado que hay una presencia suficiente de Fuerzas Armadas en la región para garantizar la seguridad de la población. El Ejército, la Marina y la Guardia Nacional han sido desplegados en Culiacán para intentar controlar la situación y prevenir más enfrentamientos. La estrategia de seguridad involucra a los tres órdenes de gobierno en distintos operativos donde se localizan los focos de violencia y se atienden inmediatamente.
El papel de los medios de comunicación
Durante su habitual conferencia de prensa matutina, el presidente López Obrador acusó a la mayoría de medios corporativos de hacer una cobertura amarillista ya que, afirmó, en su presentación de la información se magnifica la violencia y crean un alarmismo entre la población.
De acuerdo al presidente, este tipo de cobertura mediática tiene como objetivo de fondo desacreditar su gobierno y generar una percepción negativa de la situación de seguridad en México. En el mismo sentido, recordó que estos mismos medios evitaban hablar de los hechos de violencia desatados desde el sexenio de Felipe Calderón, pues en aquel tiempo realizaron un pacto de silencio con la intención de ocultar los estragos ocasionados por la falsa “guerra contra el narcotráfico”.
En el mismo tema, el mandatario reconoció que el tema de la seguridad ha sido el más difícil durante su administración luego de “cuando menos dos sexenios de mucho abandono, de desatención a las causas de la violencia”. Sin embargo, confía en que la actual estrategia de seguridad ha logrado avances en la pacificación del país.
Como muestra de ello, el mandatario refirió las estadísticas registradas por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC). En ellas se puede apreciar que la violencia, en casos de homicidios dolosos, ha disminuido en 19% durante el sexenio y el índice de secuestros también ha ido a la baja en un 77% Además, la percepción ciudadana sobre la inseguridad en su localidad también ha ido a la baja, hecho que confirma la realidad de los datos duros ofrecidos por la SSPC.
Por las acciones emprendidas desde el gobierno federal y las autoridades estatales, el mandatario pidió a la población que no se deje llevar por el amarillismo y confíe en las medidas que el gobierno está implementando para restaurar la paz en Culiacán y zonas aledañas.