24/10/2024 (Ciudad de México). La Cámara de Diputados aprobó la reforma constitucional en materia de vivienda, con la cual se busca garantizar el acceso a viviendas adecuadas para los trabajadores mexicanos a través del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit). La reforma, que modifica el Artículo 123, fue aprobada con 469 votos a favor, cero en contra y una abstención. Turnada al Senado para su aprobación a nivel federal, de ver luz verde será sometida también a votación en los congresos estatales.

Con esta reforma el Infonavit recupera su carácter social y amplía sus atribuciones para construir, arrendar viviendas y comprar superficies destinadas a este fin. Esta iniciativa forma parte del paquete de reformas propuestas por el ex presidente López Obrador, misma que ha tenido dos modificaciones de fondo por parte de la bancada de Morena en San Lázaro.

Si bien la mayoría de los diputados manifestaron previamente su respaldo a la reforma, expresaron algunas preocupaciones y 199 reservas, de las cuales sólo dos fueron aprobadas.

Dentro de la bancada de Morena, junto a las reservas presentadas, legisladores señalaron los beneficios que traería para las y los trabajadores. La diputada Mónica Angélica Álvarez Nemer destacó que la reforma representa la garantía a una vivienda decorosa y adecuada ya que “se impulsa una política más inclusiva y eficiente, que prioriza las necesidades de las y los trabajadores”.

Por su parte, la diputada petista Lilia Aguilar hizo un recuento de la destrucción de la vivienda social que efectuaron los gobiernos federales priistas de Salinas de Gortari y Ernesto Zedillo, quienes convierten al Infonavit en una entidad financiera dedicada a otorgar créditos, primero conservando la posibilidad del financiamiento para su construcción, pero después limitándolo a créditos para mejoras sobre inmuebles ya construidos.

Actualmente, en México se estima una necesidad de 2.8 millones de nuevas viviendas tan sólo para 2025, elevándose a 6.6 millones para 2030.

Aspectos más destacados de la reforma

Construcción y arrendamiento de viviendas: El Infonavit podrá construir viviendas y ofrecerlas en arrendamiento social, permitiendo a los trabajadores acceder a viviendas adecuadas con rentas bajas y nunca por encima del 30% de su sueldo mensual. Inicialmente, la propuesta consideraba imponer un plazo mínimo de diez años para que cada trabajador o trabajadora pudiera solicitar la compra del inmueble, sin embargo, el pleno aprobó una reserva para que el proceso de compra pudiera efectuarse si se contaban con las condiciones necesarias. Dentro del esquema de renta y posterior compra, la reforma conservó la opción de considerar el monto de renta pagado hasta el momento como parte del capital abonado para la compra.

Adquisición de suelo: Una segunda reserva, con miras a reforzar la capacidad del Infonavit, consistió en que este instituto podrá adquirir suelo para la construcción de viviendas, asegurando que éstas se ubiquen en zonas adecuadas y accesibles para los trabajadores.

Dentro de la misma reserva, se estipuló que las viviendas desarrolladas bajo el programa “con orientación social” sólo estarán destinado para las y los derechohabientes de este sistema. Al respecto, se destaca que del millón de casas a construir por el programa de vivienda federal, 500 mil estarán bajo responsabilidad del Infonavit, mientras que la otra mitad correrá a cargo de la Comisión Nacional de Vivienda (CONAVI) y estarán destinadas a los no derechohabientes.

La reforma establece que el Infonavit proporcionará créditos baratos y suficientes para la adquisición o mejora de viviendas, facilitando el acceso a la vivienda para los trabajadores derechohabientes.