13/06/2024 (Ciudad de México). Fue una jornada violenta. Miles de personas, convocadas por numerosas organizaciones populares y sindicatos confluyeron hacia la Plaza del Congreso, anoticiadas de la convocatoria a una sesión del Senado para la aprobación de la “Ley Bases”, cuyo título completo con que la remitió la Casa Rosada (Palacio) al Legislativo es: “Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos”.

A manera de antecedente, una versión grande de esa Ley Bases, con más artículos y capítulos, a fines de abril fue aprobada por la Cámara de Diputados, tanto en su estación en grande como en detalle. Milei la festejó como si se tratara de su aprobación final, pero faltaba el Senado.

Se organizaron grandes movilizaciones de varios sectores sociales y una Huelga General a nivel nacional el 9 de mayo. La huelga contó con la adhesión de numerosos sectores como el transporte público, los trabajadores del comercio y todo el sector educativo y de salud públicos. Fue el paro más contundente en décadas de historia argentina.

En ese contexto el Senado reinició el debate de esta ley, pero con problemas legales para el oficialismo, pues el texto de varios artículos comenzó a ser observado por no corresponder a lo aprobado en la Cámara de Diputados. Con todo y los recortes, en la Cámara Alta el proyecto de ley no conseguía la suficiente cantidad de adhesiones, hasta que Milei ordenó se suspenda el debate. Viendo esa debilidad en el Congreso, la mayoría de los gobernadores provinciales rechazaron la convocatoria a la firma de un “Pacto de Mayo para refundar Argentina” que hizo el presidente para el 25 de mayo en la ciudad de Córdoba, la tercera ciudad argentina que queda al noroeste del país.

En lo que fue la primera crisis política al interior del gobierno, Milei despidió el 29 de mayo a Nicolás Posse, que ejercía la Jefatura de Gabinete, designando en su lugar a Guillermo Francos, que hasta ese momento era el ministro del interior. El ascenso de Francos buscaba darle más poder en las negociaciones con los senadores para la aprobación de la Ley Bases en el Congreso.

Ayer se impuso la línea dura, pese a la masiva resistencia en las calles cercanas al Congreso, ordenando la ministra de seguridad, Patricia Bullrich, una violenta represión por la policía que dejó numerosos heridos y detenidos. De esta forma fue dificultosamente aprobada en el Senado la ley, tras quedar con 36 votos en contra y 36 votos a favor, debiendo votar la vicepresidenta Villarruel para inclinar la decisión.

Sin embargo, no es todavía la definitiva. Esta ley volverá a Diputados ya que se le hicieron cambios de fondo y de forma, aunque ha mantenido el contenido medular del ajuste ultraliberal. Veamos cuatro componentes esenciales.

Otorga al presidente de ideología neofascista, facultades extraordinarias para gobernar por decreto durante un año, en circunstancias en que ha caído el apoyo ciudadano a la gestión de gobierno. Según una encuesta de Opinión Pública de la Consultora Interdisciplinaria en Desarrollo (CID) y Gallup, el porcentaje de aprobación a Milei está en el 36%, con una pronunciada bajada desde aquel 60% que obtuvo en la segunda vuelta presidencial, el 19 de noviembre del 2023.

La ley aprobada en el Senado crea un Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI) privadas nacionales y extranjeras en áreas estratégicas como ser: Hidrocarburos, Litio, Minería, Energía. Este componente supone el repliegue del Estado, la privatización y transnacionalización de la actividad económica. La ex presidenta Cristina Fernández Kirchner calificó al modelo en ejecución como un Modelo Neocolonialista.

La ley que baja a Diputados permite también la privatización de varias empresas del Estado, aunque se logró excluir a algunas importantes empresas.

Finalmente, la ley aprobada en la instancia senatorial allana una contrarreforma laboral que, al recortar los derechos de las trabajadoras y los trabajadores, aumentará el empleo precario.