14/08/2023 (Ciudad de México). El Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, actualmente con 90% de avance, iniciará sus operaciones el 17 de Septiembre de este año con la salida de un tren de pasajeros y uno de carga desde Salina Cruz, Oaxaca, hacia Coatzacoalcos, Veracruz, afirmó el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
El avance en la rehabilitación de las vías férreas es del 79.39 por ciento; este proceso concluirá en agosto de 2023. En total se modernizarán 227 kilómetros de vías, 82 puentes, 290 obras de drenaje y los puertos de Coatzacoalcos, Veracruz y Salina Cruz, Oaxaca.
La infraestructura ferroviaria se divide en tres:
- Línea Z, de 308 kilómetros. Conecta el Golfo de México con el océano Pacífico, desde el puerto de Coatzacoalcos, Veracruz, a Salina Cruz, Oaxaca.
- Línea FA, de 329 kilómetros. Recorre desde Coatzacoalcos a Palenque, Chiapas, donde interconectará con el Tren Maya.
- Línea K, de 459 kilómetros. Enlaza de Ixtepec, Oaxaca, a Ciudad Hidalgo en Chiapas, región que llega a los límites con Guatemala.
Polos de desarrollo a lo largo del Corredor
Junto a la puesta en marcha de esta vía férrea como punto de conexión interoceánica, también se encuentra el desarrollo de 10 parques industriales a lo largo del corredor bajo el esquema de concesiones al sector privado para su operación bajo un régimen tributario especial. Dos de estos parques se encontrarán en Coatzacoalcos, mientras que en Jáltipan, Texistepec y San Juan Evangelista se tiene planeado uno en cada demarcación, todos ellos en Veracruz; Por su parte, los ubicados en la entidad oaxaqueñas estarán en los municipios de Salina Cruz, Ciudad Ixtepec, Asunción Ixtaltepec, Mixtequilla y San Blas Atempa.
A la fecha se han realizado los procesos de licitación para cinco de estos parques: Coatzacoalcos I (257ha), Coatzacoalcos II (13ha), Texistepec (462ha) y San Juan Evangelista (360ha) en Veracruz, y Salina Cruz (82ha) en Oaxaca, en los cuales hubo más de treinta postulantes para cada uno, de acuerdo a lo afirmado por la Secretaría de Economía, Raquel Buenrostro en junio pasado. De acuerdo con el calendario de licitaciones los ganadores se anunciarán entre Diciembre y Marzo.
Al respecto, la funcionaría declaró que el Gobierno Federal está interesado en que “sean empresas que se comprometan con el monto de empleos, salario de empleados promedio, [y evaluar] qué están dispuestos a dar en términos de infraestructura social.” Además, señaló que los sectores de principal interés para operar en esta región son los de electrónica, semiconductores, automóviles, dispositivos médicos, farmacéutica, energía eléctrica, maquinaria y equipos, TIC, metales, petroquímica y agroindustria.
Apuesta mexicana para el comercio mundial
Inaugurado en 1907, el Corredor Ferroviario del Istmo de Tehuantepec fue relegado al olvido con el desarrollo del Canal de Panamá en 1914. Actualmente, este canal presenta algunos problemas en operaciones, por lo que la apuesta para este corredor ha despertado interés en todo el ámbito económico mundial, pues permitiría un mayor comercio con los países asiáticos, principalmente China.
Como estrategia para atraer a los inversores, el gobierno mexicano ha ofrecido incentivos fiscales, tales como la exención total del impuesto sobre la renta (ISR) durante los primeros tres años de operaciones, la exención para las operaciones del impuesto al valor agregado (IVA) y reembolso a las empresas del IVA por compras fuera de los parques durante los primeros cuatro años.
Si bien la construcción total de estos complejos industriales tomará más tiempo, el actual avance del 90% permitirá la inauguración del transporte ferroviario interoceánico para mediados de Septiembre.
La apuesta por el desarrollo regional en el sureste
Además de la rehabilitación de las líneas férreas que conforman la columna vertebral del Corredor Interoceánico, el Gobierno de México también planea abrir otras rutas hacia el sureste de la región. Entre ellas se encuentra la del Ferrocarril Ixtepec-Tapachula, que corre desde Ixtepec, Oaxaca hasta Ciudad Hidalgo, en Chiapas, y consta de 459 km. Una segunda ramificación correrá desde Coatzacoalcos, Veracruz, hasta Palenque, Chiapas, y constará de 329 km.
Finalmente, también se planea la construcción de un gasoducto que atraviese el Istmo de Tehuantepec, con lo cual se abre la posibilidad de construir una planta de gas licuado en Salinas Cruz, Oaxaca.