02/08/2023 (Ciudad de México). La polémica sobre los nuevos libros de texto gratuitos para el próximo ciclo escolar en México escala. El día de ayer, el noticiero Hechos con Javier Alatorre, trasmitido por Televisión Azteca, lanzó una campaña contra la Secretaría de Educación Pública calificando el contenido de los nuevos materiales educativos de “comunista”.
En el espacio de TV Azteca se afirmó que “el virus comunista, su resurgimiento, está en la educación comunista que la Secretaría de Educación Pública busca imponer a las niñas y a los niños de México”.
También especificó que los nuevos libros “son las guías de la educación comunista que pretenden que los niños no lean, no aprendan matemáticas, lógica, ciencias, ética, no quieren que sean mejores y que los negocios sean mal vistos”. Añadió que en estos materiales educativos “se promueve el desprecio al trabajo, a la cultura, a la región y a la familia, para generar violencia entre los mexicanos y condenarlos a la pobreza, a la mediocridad y al odio”.
Esta campaña se encuentra en todos espacios informativos de esta televisora, bajo el eslogan “con los niños no” . TV Azteca afirma que el objetivo de los nuevos libros de texto es convertir a “los niños en esclavos de una dictadura comunista”.
Sin embargo, esta campaña de desprestigio de los nuevos materiales educativos para el ciclo 2023-2024 no solo está presente en la televisora de Ricardo Salinas Pliego. Carlos Alazraki, figura mediática abiertamente contraria al gobierno de Andrés Manuel López Obrador, afirmó en su programa Desayunando con Alazraki que el contenido de los nuevos libros es un “elogio a la violencia de grupos guerrilleros”.
Junto a Beatriz Pages, directora de la Revista Siempre y Carlos Mancera, presidente del Consejo Nacional de Participación Social en Educación, Alazraki afirmó conocer testimonios de estudiantes de escuelas privadas que “están sufriendo discriminación por tener piel blanca, esto se promueve desde los libros”.
Ideologización en la educación
En entrevista con De Raíz, el maestro en Pedagogía Axel Meléndez recordó que en el decreto presidencial de Adolfo López Mateos, del 12 de febrero de 1959, se estableció por primera vez en México la existencia de libros de texto gratuitos para las y los estudiantes, con el objetivo de que la gratuidad en la educación fuera plena al garantizar, sin costo, los materiales indispensables a nivel básico.
El Mtro. Meléndez comentó que hubo mucha resistencia y critica a este decreto de algunos sectores. “No faltaron las resistencias de familias de escuelas privadas, medios de comunicación (periódicos), de la industria editorial privada y de profesores y profesoras que participaban de alguna editorial, ya que argumentaban que dicha iniciativa era una cuestión autoritaria, eran libros comunistas, que afectaban a los intereses de la industria editorial y que marcaba el monopolio del mismo” puntualizó Meléndez.
Sobre la neutralidad de la educación, comento que “vale la pena recordar ante las afirmaciones sobre la supuesta ideologización, que la educación nunca ha sido, ni será, un espacio neutro. La educación participa de los procesos sociales y los procesos sociales impactan en la educación. En la educación se construyen valores, formas de interpretar la realidad y relacionarse con la misma, influye en las ideas y conductas, por lo que la educación, ya sea por las directrices que se marcan desde las autoridades educativas de los diferentes gobiernos o por la misma práctica docente, nunca, en la historia de la misma, ha sido un espacio neutro.”
Concluyó cuestionando si los gobiernos anteriores en realidad fueron neutros o no alrededor de los libros de texto gratuitos. “¿Fue neutro que Salinas de Gortari retirara los libros de texto de historia porque se mencionaba la participación del ejército en la matanza del 02 de octubre de 1968? ¿Fue neutro que, en 2005, mientras gobernaba Vicente Fox, hubiera criticas porque los libros de texto no mencionaban las crímenes y matanzas de 1968 y 1971? La respuesta es sencilla: nunca ha existido una neutralidad en la educación y, en este caso, tampoco sobre los libros de texto. Entonces, lo primero a desmontar es la supuesta ideologización o neutralidad que deberían de tener estos materiales educativos”.
Posición del personal docente
En conferencia de prensa la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) dio a conocer su posicionamiento político sobre los libros de texto.
“El debate y la revisión (de los nuevos libros y del nuevo plan de estudios de la SEP) deben ser en las aulas” considero Pedro Hernández, secretario general de la Sección IX de la CNTE. Reconoció que el tema de los libros de texto se ha vuelto un espacio de disputa política electoral, donde están intereses empresariales que ven mermados su negocio con la gratuidad de estos libros.
Señaló que “falta conocer más de fondo la dinámica que plantean ahora con estos ejemplares que cambian radicalmente la concepción que se tenía de libros por asignatura. Ahora se privilegia lo que se señala como proyectos de aula, escuela, con enfoque comunitario”
También puntualizó el papel que juega el personal docente en este contexto. “Es importante que centremos la discusión en la necesidad de contar con instrumentos en las aulas que nos permitan avanzar en una educación, que nos ayude a pensar y no solo obedecer. Los libros son sólo una herramienta, lo verdaderamente importante es el trabajo de los maestros. La crítica de la CNTE es que no hay libros por asignaturas. Los maestros necesitamos tener conocimiento claro de estos libros y cambios metodológicos y discutirlo con la SEP. Necesitamos espacios de diálogo y establecer acuerdos fundamentales”.