09/09/2024 (Ciudad de México). El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, confirmó durante su habitual conferencia matutina que su hijo, Andrés López Beltrán, buscará un puesto en el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
Durante su intervención, el titular del Ejecutivo y fundador del movimiento que lo llevó a la Presidencia, destacó que sus hijos han respetado un acuerdo familiar de no ocupar cargos públicos mientras él esté en funciones. “Con mis hijos, hicimos un acuerdo desde hace tiempo, les agradezco mucho porque lo han respetado, de que ellos mientras yo fuese dirigente o servidor público, ellos no iban a trabajar en el gobierno y lo han cumplido, me han ayudado mucho en eso y también voluntariamente me ayudan pero no son funcionarios, no trabajan, pero uno tiene que ser consecuente”, afirmó.
Sin embargo, también subrayó que sus hijos son libres de buscar participar en tareas gubernamentales y de buscar el respaldo a través del voto, siempre respetando el pacto de no hacerlo mientras él sea funcionario público. “Si yo aceptara el nepotismo, el amiguísimo, el influyentismo no tendría la autoridad moral y cualquiera me faltaría al respeto”, agregó.
El presidente también mencionó que, tras su jubilación, sus familiares serán libres de involucrarse en la vida pública. “No han podido ellos participar por eso, pero tenemos el compromiso de que terminando ya pueden, igual Jesús (refiriéndose a su hijo menor) cuando termine de estudiar y quiera participar que lo haga, son libres”.
Además, destacó que su contribución como líder inicial de la Cuarta Transformación no le pertenece a él y tampoco “les pertenece a mis hijos ni a nadie, cada quien tiene que forjarse su propio destino y así lo entienden ellos, porque no se heredan, en política, genes; es la conducta, la rectitud, el trabajo y el amor al pueblo” lo que sí se hereda, concluyó.
Las campaña sucias contra la familia presidencial
La noticia de que Andrés López Beltrán buscará un cargo en Morena no ha estado exenta de controversias y ataques. Desde hace tiempo, la familia del presidente ha sido objeto de una campaña sucia que busca generar su descrédito entre la población. Esta campaña ha incluido acusaciones de nepotismo, corrupción y tráfico de influencias, aunque éstas acusaciones no han sido respaldadas por pruebas contundentes.
López Obrador ha defendido a su familia en múltiples ocasiones, argumentando que los ataques son parte de una estrategia para debilitar su administración y el movimiento que lideró, pues manchando la imagen de su familia buscan golpearlo políticamente, ha declarado en varias ocasiones.
Estas campañas han provenido especialmente de grupos mediáticos relacionados con actores políticos y grupos empresariales contrarios a la actual administración federal, especialmente el canal LatinUs, financiado presuntamente por el priista Roberto Madrazo mediante desfalcos a los sistemas de salud estatales. Entre las acusaciones presentadas contra la familia de López Obrador se encuentran supuestos negocios privados para la venta de cacao al programa “Sembrando vida”, una vivienda en Houston o venta de material de construcción para el Tren Maya.