19/08/2024 (Ciudad de México). En su más reciente informe el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) reveló una alarmante realidad: el 69% de los hablantes de lenguas indígenas en México viven en situación de pobreza. Este dato subraya las profundas desigualdades que persisten en el país, especialmente entre las comunidades indígenas, ya que enfrentan barreras significativas en términos de acceso a recursos y oportunidades.

El informe presentado se encuentra basado en la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) 2022 del INEGI, mismo con el que fue revelado hace un año que 5.1 millones de mexicanos lograron salir de la pobreza multidimensional.

¿Qué dice el informe del Coneval?

En 2022, el 36.3% de la población en México se encontraba en situación de pobreza, lo que representa una disminución en comparación con el 41.9% registrado en 2018. Esta reducción se atribuye a diversas políticas sociales implementadas por el gobierno de López Obrador, como el aumento del salario mínimo y la expansión de programas de bienestar.

A pesar de la reducción general de la pobreza, la pobreza extrema sigue siendo un desafío significativo. En 2022, el 7.1% de la población vivía en condiciones de pobreza extrema, lo que implica una mejora respecto al 7.4% de 2018. Sin embargo, este porcentaje aún representa a millones de personas que carecen de acceso a servicios básicos como alimentación, salud y vivienda.

Desigualdades regionales y grupos vulnerables

La pobreza en México presenta marcadas desigualdades regionales. Los estados del sur del país, como Chiapas, Oaxaca y Guerrero, registran los índices más altos de pobreza, mientras que estados del norte, como Nuevo León y Coahuila, muestran los índices más bajos. Estas disparidades reflejan diferencias en el desarrollo económico y en la implementación de políticas públicas a nivel local.

Los grupos más vulnerables a la pobreza incluyen a las comunidades indígenas, las personas con discapacidad y las mujeres jefas de hogar. En particular, 7 de cada 10 hablantes de lenguas indígenas vive en situación de pobreza, lo que subraya la necesidad de políticas específicas para abordar las desigualdades que enfrentan estos grupos.

Esta cifra es un reflejo de múltiples factores, incluyendo el racismo y la discriminación que afectan la economía de estas comunidades. Actualmente, en México se hablan más 67 lenguas, pero los hablantes de alguna de estas lenguas presentan gran desigualdad de oportunidades y remuneración frente a los hablantes del español.

Posición de los hablantes de lenguas indígenas frente a los hispanoparlantes

Las diferencias en ingresos son notables. Por ejemplo, el ingreso promedio trimestral de una mujer no indígena es de 21 mil 110 pesos, mientras que una mujer que habla una lengua indígena gana en promedio 9 mil 822 pesos. En el caso de los hombres, la diferencia es igualmente significativa: 31 mil 887 pesos para los no indígenas frente a 17 mil 281 pesos para los hablantes de lenguas indígenas.

México, desde su origen, fue un territorio multilingüe y multiétnico. Luego de la invasión española en el siglo XVI, el español fue impuesto por las autoridades para toda la población, negando derechos y servicios a quienes no lo hablaran y generando discriminación hacia ellos. Pese a los cambios políticos, los hablantes de las lenguas originarias no han logrado ser integrados a las dinámicas de poder heredadas desde hace cinco siglos.

A nivel mundial, el 43% de las lenguas están en peligro de desaparecer debido a la hegemonía lingüística de algunas lenguas respaldadas es la estructura de dominación de sus hablantes frente a las minorías de determinadas regiones.