08/08/2024 (Ciudad de México). El Tribunal Electoral (TEPJF) desestimó que el presidente López Obrador o alguno de los gobernadores influyeran en los resultados electorales del 2 de Junio. Así lo resolvió este órgano del poder judicial frente a las denuncias de los partidos opositores por una presunta promoción personalizada, vulneración a los principios de imparcialidad, neutralidad y equidad por parte del presidente de la República.

En su proyecto de resolución, el TEPJF determinó que “No existió un trato diferenciado del presidente de la República frente a otros funcionarios de similar naturaleza”, además de precisar que las medidas de no repetición solicitadas para el caso son ineficaces.

Entre estas medidas, la oposición solicitaba la suspensión de las mañaneras durante los procesos electorales, la cuantificación del costo e impacto económico de las mañaneras para beneficiar a una candidata y un reconocimiento público por parte del presidente sobre su supuesta intromisión en el proceso electoral.

Otro fracaso más para la oposición

Ante la abrumadora diferencia de votos emitidos en las urnas a favor de Claudia Sheinbaum, la oposición ha buscado frenar el avance de la autonombrada Cuarta Transformación mediante dos estrategias. La primera de ellas, deslegitimar los resultados y, la segunda, disminuir su fuerza en el Congreso.

Con la resolución del Tribunal la estrategia opositora sufre una nueva derrota, pues su principal objetivo consistía precisamente en obligar al presidente a reconocer que sus declaraciones durante la conferencia matutina manipularon la intención de voto de la ciudadanía, con lo cual la diferencia de casi 20 millones de votos entre la candidata de Morena y la candidata del PRIAN podría ser puesta en duda.

Por el contrario, en un juicio a parte, la sala superior del mismo tribunal determinó que la candidata Xóchitl Gálvez sí incurrió en calumnias durante el tercer debate presidencial al llamar “narcopartido” a la agrupación política que postuló a Sheinbaum como candidata.

El siguiente fracaso anunciado

Con 300 diputados elegidos de manera directa por la votación y 200 asignados a cada partido a partir del porcentaje de votos en la elección federal, la oposición registra el menor número en toda su historia. Con esta representación en el Congreso, esta opción política no cuenta con el respaldo necesario para impedir que Morena y sus aliados aprueben las reformas prometidas durante su campaña electoral.

Frente a este panorama legislativo, PRI, PAN, PRD y actores aliados del bloque conservador han lanzado una campaña para cuestionar una supuesta sobrerrepresentación de Morena y aliados en la Cámara de Diputados.

Entre sus argumentos se encuentra que el partido hoy en el poder no obtuvo en las elecciones presidenciales el mismo porcentaje con el que cuenta en el Congreso. Para lo anterior, omiten mencionar que este porcentaje no se debe directamente a la elección presidencial, sino a mecanismos establecidos en la Constitución para regular la representación de todos los partidos en el poder legislativo.

Cabe destacar que estos mecanismos hoy cuestionados han sido aplicados desde 2009, incluso por Lorenzo Córdova, ex presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), quien hoy se suma a la exigencia de que la Constitución sea interpretada de otra manera y no conforme a lo expresado literalmente en ella.

Como última embestida para no perder en lo mediático el terreno ya perdido en lo político, recientemente la candidata presidencial del PRIAN en las pasadas elecciones y hoy senadora panista, Xóchitl Gálvez, anunció que presentará un juicio ciudadano para evitar la sobrerrepresentación de Morena en la LXVI Legislatura.

Durante su anuncio en redes sociales, la ex candidata presidencial invitó a la ciudadanía a sumarse, pues, a su juicio, Morena se quiere “robar casi 10 millones de votos en la asignación de diputados”. Este nuevo intento de frenar la fuerza legislativa de Morena y aliados será llevado al Tribunal Electoral una vez que se emita la resolución definitiva respecto a la asignación de diputados plurinominales.