El presidente Andrés Manuel López Obrador cuestionó la decisión de la Sala Especializada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) respecto a la presunta violencia de género contra la excandidata presidencial de la derecha, Xóchitl Gálvez, la cual aún debe ser resuelta por la Sala Superior, precisó López Obrador.
“Hasta ahora lo que ha resuelto no tiene ningún fundamento. No es que no me puedan castigar por ser un asunto administrativo, es que sencillamente, claramente están mintiendo, están falseando la realidad.”, aseguró el titular del Ejecutivo Federal.
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El mandatario también criticó la integración “conservadora” de los magistrados de la sala, a quienes acusó de haber sido designados por cuotas. Asimismo, reafirmó la necesidad urgente de reformar el Poder Judicial para evitar la asignación de puestos y permitir que sea el pueblo quien designe a los magistrados.
“Seguramente estos magistrados son del bloque conservador, porque así era antes. Todos estos organismos estaban manejados por conservadores, por reaccionarios, por gente que llegaba ahí recomendada por los que se sentían dueños de México”, sentenció el presidente.
La resolución de la Sala Especializada que acusó el mandatario fue emitida el 13 de junio y señala que López Obrador, “cometió violencia política de género en contra de una servidora pública, con expresiones vertidas en las conferencias matutinas conocidas como ‘mañaneras”. Entre los argumentos vertidos está la configuración de “violencia simbólica”.
Por su parte, Gálvez reaccionó a la negativa del titular del Ejecutivo Federal y acusó a López Obrador de violar la ley por el supuesto uso de recursos públicos y difusión de propaganda gubernamental, según comunicó la Sala Especializada del TEPJF el 11 de julio.
